Sabiduría de redes sociales (1): “todos pecamos diferente”

By Pensamiento Breve

Buscar sentirse bien no es tonto, ¿pero tratar de encontrar la paz interior en un “meme” o en una imagen poco diseñada de facebook? es el colmo, llevo ya varios meses viendo la misma frase pero con diferente imagen y diferente usuario: “No puedes juzgar a los demás solo porque pecan de una forma diferente a ti”. Sí, se publica con orgullo y pretende ser la sentencia y la cerrada de boca definitiva de muchos “creyentes” que, de alguna manera, se sienten perseguidos.

Dejaré el tema de juzgar para otro día, aunque si debo decir que hay parámetros bíblicos que nos permiten hacerlo en específicas ocasiones, sin embargo lo que es lamentable de esta frase es quién está detrás de ella; porque el que se siente identificado con dicha frase está mostrando que:

1. En efecto, hay pecado en su vida. Y creo que (para el que la postea) no se trata de algo que requiera la confesión delante de Dios, sino más bien un pecador que casi con orgullo dice: “no te metas con el estilo de vida que estoy llevando, porque tú también pecas”, es esa clase de humildad colectiva que existe solo para atribuirnos pecados y sentirnos bien (o mal) juntos.

2. Se contradicen ellos mismos porque amenazan para que no juzguen su pecado porque otros también tienen pecados. La frase misma en realidad lo que está haciendo es juzgarte, pero bueno… una confesión que nadie pidió que trata además de hacernos sentir mal, solo por leerla.

3. Es la expresión de un corazón, que sabe que tiene pecado y que en realidad no piensa hacer nada al respecto. Que consiente sus pecados y los proteje del escrutinio de los “espiritualoides”. Está afirmando que, en realidad, los que están mal son los otros.

4. Y por último, aunque hay muchas cosas más sobre esta frase, siempre pienso en Hebreos 12:13 “y haced sendas derechas para vuestros pies, para que lo cojo no se salga del camino, sino que sea sanado”, me dice que aquello que cojea, que no es estable en nuestra vida espiritual, no tiene que quedarse cojo, ni salirse del camino (no hay que consentirlo ni protejerlo) para dejarlo estar y convivir con ello y que además empeore, sino que tengo que tomar decisiones intencionales para que pueda “sanar”, que el Espíritu Santo me cambie.

No es nada más decir “toda mi vida he luchado con ese pecado…” con falsa piedad, sino agregarle “lo traigo a la confesión con el Señor, para apartarme de ello y por su gracia, alcanzar misericordia.”. Porque aunque todos pecamos de maneras diferentes, a quien tienes que encarar es al Señor y a él no le puedes atribuir pecados, por tanto tiene todo el derecho de juzgar, allá tú si le posteas la frasesita.

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Last modified: September 16, 2021

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