Las culturas tienen el poder de atraer a propios y extraños, son capaces de hacer que un extranjero renuncie a su patria movido por la fascinación que le produzcan las costumbres ancestrales de otro país; ese conjunto de conocimientos, ideas y tradiciones que caracterizan tal o cuál pueblo y región del planeta. Pero debo aclarar que, aunque atractivas y cautivantes, algunas áreas de las culturas...
Exhibido por la cruz
El mensaje del Cristo crucificado es revelador; no solo porque nos reveló el amor del Padre Celestial al entregarnos a su único, sino porque esos momentos de su pasión en el pasado reveló el presente, y me temo que el futuro, pues, los momentos en el que El Hijo estaba muriendo exhibirían a las personas del pasado que todavía sobreviven hoy… y entre esas te encuentras tú. Pero cierto joven...
Por causa de un niño
Mi papá cuenta que el nacimiento de mi hermana menor lo hizo vender un auto muy preciado, mi mamá cuenta que la tuvo durante meses pegada a su pecho para darle el calor que necesitaba. Mi esposa tuvo que hacer una dieta muy rigurosa casi un año porque mi segundo hijo era alérgico a la proteína de leche de vaca, y a mi me tocó lo más fácil, ceder todos los ahorros destinados a la compra de una...
La bonita navidad que no quiero
Por ser una época de tradiciones, déjenme ser tradicionalista al decir lo que ya todos saben: la navidad no se trata de regalos, comida y villancicos (aunque adictivos y muy necesarios). Los creyentes debemos forzarnos a entender la navidad de formas más profundas y substanciales; esto me hubiese gustado entenderlo cuando de niño recibí una lampara nueva que tenía estropeado el botón de...
Una aclaración para las peticiones de tu corazón
El caballito de batalla de muchos jóvenes que no oran pero quieren que esas raras y pequeñas apariciones de sus deseos delante de Dios sean contestadas favorablemente es el Salmo 37:4: “deléitate asimismo en Jehová, y él te concederá las peticiones de tu corazón.”; y por lo general prestando más atención a la segunda parte, la conveniente, aquella que les interesa; casi viendo como un...
La guía oficial del “calientabancas”
Aunque algunos santurrones nos han puesto un sobrenombre amarillista, no pueden negar que sin nosotros los domingos solo habrían dos o tres personas en la iglesia. Somos quienes llenamos las escuelas dominicales y los servicios generales, los que hacemos que los que pasan por la calle vean gentío en las reuniones. Y como las bancas no se pueblan solas, las iglesias deben admitirlo: nos necesitan...
Hay adoradores y también cantantes cristianos
En mi pueblo y en los aledaños casi cada mes aparece un afiche publicitario de un (totalmente diferente y para nada cliché) nuevo recital cristiano, los nombres son casi gemelos: “Adoración extrema”, “Generación de adoradores” o “Noche de adoración y avivamiento”; en fin… en realidad cualquier nombre es permisible para estos eventos siempre y cuando lleve alguna de esas palabras. Dichas...
Solo debes temer
Apoyar a un misionero o un pastor que predica la palabra puede parecer fácil; porque “solamente es ofrendar para que haga el trabajo” que yo no puedo o que… tal vez no tenga la valentía para hacer. Apoyar a un obrero que está obedeciendo la gran comisión es algo más grande que nada más tener una billetera gorda y sacar un billete y elegir al misionero tal como si se...
Redefiniendo
Búsquese la palabra “Cristianos” en los diccionarios orales de la sociedad moderna y en las enciclopedias no autorizadas (y poco actualizadas) del usuario de las redes sociales (desde el más corriente hasta el más intelectual) y se encontrará repetitivas referencias, tales como “hipócritas”, “religiosos”, “fanáticos”...
Contra la estatua
“Mándase a vosotros, oh pueblos, naciones y lenguas, que al oír el son de la bocina, de la flauta, del tamboril, del arpa, del salterio, de zampoña y de todo instrumento de música, os postréis y adoréis la estatua de oro que el rey Nabucodonozor ha levantado; y cualquiera que no se postre y adore, inmediatamente será echado dentro de un horno de fuego ardiendo.” (Daniel 3:4-6) Y así se empieza...