Game of Thrones y los defensores de lo indefendible

G

La serie estuvo en tendencia y se transmitió su última y por consiguiente “mejor temporada” hace unas semanas; aunque si se trata de hacerle honor a la verdad: Game of Thrones es solo un ofensivo intento de copia épica a El Señor de los Anillos; pero no vine aquí a escribir sobre libros y compararlos sino a presentar mi defensa a las opiniones de muchos cristianos que defienden la historia del señor Martin; sí, hay pequeños cristos fieles a esta serie y otras, sentándose sin dudar frente al televisor, computadora o celular en mano para ver una tonelada de imágenes sexuales sin importar lo que está entrando al templo del Espíritu.

No importa lo que digas (y permíteme ser ofensivo acá): no importa que estupidez filosófica intentes hacer pasar como argumento si eres un cristiano que no evita los contenidos sexuales en series y películas; lo estás haciendo todo al revés porque al hacerlo…

No estás sacando el ojo ni cortando la mano que es ocasión de caer (Mt.5:27-30); estás aceptando algo que se guardará en la mente para una anunciada derrota en el pecado.

No estás viendo algo que sea verdadero, honesto, justo, puro, bueno, de buen nombre, con virtud alguna, con algo digno de alabanza (Fil.4:8); sino algo que produce (y te aseguro que lo hará) pensamientos mentirosos, inmorales, injustos, sucios, dañinos y sin ningún provecho para la vida cristiana.

No estás informándote del acontecer pecaminoso para evitarlo; lo estás cultivando. Que porque te has inventado en una lógica retorcida que solo con ver algo que es pecado no estás pecando; que al ver esta clase de escenas solo estás reforzando tu sensibilidad moral. ¿Algo así como acercarte a la fornicación para huir de ella? (1 Cor.6:18).

No estás admirando algo que es natural, estás viendo una versión pervertida y oscura de lo que Dios creó; un esfuerzo demoniaco para reemplazar lo hermoso, divinamente establecido para el matrimonio (Heb.13:4). Dios juzga a los que tienen relaciones sexuales de manera prohibida y también a los que miran esas relaciones en la pantalla.

No estás examinándolo todo para retener lo bueno, estás mirando todo lo malo e intentando disfrazarlo de bueno. No te estás absteniendo de toda especie de mal sino que estas viendo más formas de hacerlo y reteniéndolas. (ver 1.Tes.5:20-22)

No estás aplicando (según algunos) lo de para los puros todas las cosas le son puras (Tito 1:15). ¡Qué conveniente y sospechosa forma de escoger material para aplicar versículos bíblicos!

Y por último, por favor no intentes decirme que no tiene nada de malo porque en la biblia también hay sexo, porque las menciones en la biblia no son de libertinaje y cuando lo hubo fue condenado y pagado con consecuencias. Tampoco hay en la biblia descripciones gráficas de relaciones sexuales para el disfrute del público. Tampoco me saques a relucir el libro de Cantar de los Cantares porque no podrías defender una cosa con la otra ni en un millón de años; y si lo haces, definitivamente necesitas trabajar en la pureza mental.

Así que despídete de la pureza y dale la bienvenida a un fraude de vida cristiana sin responsabilidades, y que la gracia de los reyes de Game of Thrones te sepan defender de las consecuencias del pecado.

Compartir

Acerca del autor

Lester H. Delgado

Esposo, papá y pastor.
6 años de estudio formal en teología, 3 de estudio formal en escritura creativa y una vida tomando café... también formalmente.

por Lester H. Delgado

Lester H. Delgado

Esposo, papá y pastor.
6 años de estudio formal en teología, 3 de estudio formal en escritura creativa y una vida tomando café... también formalmente.

Contactar

Si quieres compartir algo acerca de ti, puedes escribirme en la cuenta de Instagram.