Creo que si hubiera un tutorial para llevar la vida cristiana a la destrucción, sería algo así:
1.NO PRESTE ATENCION AL MANDATO DE DIOS
No tome muy en serio eso de que Dios vela por nuestro bien y que por esa razón nos pide que obedezcamos todos sus mandamientos, al final, Dios es bueno y arreglará todo sin tanto problema.
Tome como ejemplo lo que pasó con cierto personaje de Israel en época de Josué y los muros de Jericó.
Esto es en el momento de conquistar la ciudad
“Pero vosotros guardaos del anatema; ni toquéis, ni toméis alguna cosa del anatema, no sea que hagáis anatema el campamento de Israel, y lo turbéis.” (Josué 6:18)
“Pero los hijos de Israel cometieron una prevaricación en cuanto al anatema; porque Acán hijo de Carmi, hijo de Zabdi, hijo de Zera, de la tribu de Judá, tomó del anatema; y la ira de Jehová se encendió contra los hijos de Israel.” (7:1)
Sepa además que “Anatema” significa “Apartado para la Destrucción” así que, vamos bien.
2.NO PIENSE EN LAS CONSECUENCIAS
Crea que en realidad Dios no habló en serio cuando advirtió sobre las consecuencias, total, realmente no se está atentando contra su Santidad y la autoridad de Su Palabra. Quédese tranquilo, no pasa nada. Las consecuencias no son tan graves a veces.
“Y los de Hai mataron de ellos (del ejército de Israel) a unos treinta y seis hombres, y los siguieron desde la puerta hasta Sebarim, y los derrotaron en la bajada; por lo cual el corazón del pueblo desfalleció y vino a ser como agua.” (7:5) paréntesis agregado.
3.NO TRATE DE ENTENDER SUS CIRCUNSTANCIAS
Aún cuando a su vida espiritual hayan llegado desgracias por dar los pasos anteriores, no se acerque a Dios para buscar respuestas, puede que en este momento usted esté muy confundido pero será mejor no agravar más la situación haciendo que Dios le diga que hay pecado en su vida. Mejor búsquese un charlatán que declare victoria sobre su persona y así se irá olvidando de su actual estado de calamidad aunque su vida siga en el pecado.
Evite esto:
“Y Jehová dijo a Josué: Levántate; ¿por qué te postras así sobre tu rostro? Israel ha pecado, y aun han quebrantado mi pacto que yo les mandé; y también han tomado del anatema, y hasta han hurtado, han mentido, y aun lo han guardado entre sus enseres. Por esto los hijos de Israel no podrán hacer frente a sus enemigos, sino que delante de sus enemigos volverán la espalda, por cuanto han venido a ser anatema; ni estaré más con vosotros, si no destruyereis el anatema de en medio de vosotros.” (10-12)
4.NO CORRIJA LAS COSAS A LA MANERA DE DIOS
Hay cientos de alternativas para enmendar las cosas, recuerde que tratar de buscar la santidad de nuevo puede resultar mas que vergonzoso, es algo humillante. Deje que pase el tiempo, porque el tiempo todo lo cura, todo lo soluciona. Es mas tardado y 99% falible, pero ¡oiga! la de Dios es más difícil:
“Levántate, santifica al pueblo, y di: Santificaos para mañana; porque Jehová el Dios de Israel dice así: Anatema hay en medio de ti, Israel; no podrás hacer frente a tus enemigos, hasta que hayáis quitado el anatema de en medio de vosotros.” (13)
5.NO ACEPTE SU PECADO:
Escóndalo. Confiese su pecado solo si es necesario, de ser posible, cuando ya haya dañado a los suyos y Dios haya dado su resolución. Algo de mérito tendrá.
“Y Acán respondió a Josué diciendo: Verdaderamente yo he pecado contra Jehová el Dios de Israel, y así y así he hecho. Pues vi entre los despojos un manto babilónico muy bueno, y doscientos siclos de plata, y un lingote de oro de peso de cincuenta siclos, lo cual codicié y tomé; y he aquí que está escondido bajo tierra en medio de mi tienda, y el dinero debajo de ello.” (20-21)
6. OBTENGA EL RESULTADO:
“Entonces Josué, y todo Israel con él, tomaron a Acán hijo de Zera, el dinero, el manto, el lingote de oro, sus hijos, sus hijas, sus bueyes, sus asnos, sus ovejas, su tienda y todo cuanto tenía, y lo llevaron todo al valle de Acor. Y le dijo Josué: ¿Por qué nos has turbado? Túrbete Jehová en este día. Y todos los israelitas los apedrearon, y los quemaron después de apedrearlos.” (24-25)
NOTA IMPORTANTE
Para el efecto opuesto, una vida cristiana no destruida, conviene hacer exactamente lo contrario a lo leído.